Cuando uno se abre a las oportunidades y está dispuesto a hacer lo que sea necesario para obtener éxito, este llega porque uno se inclina hacia él.
Una ventaja de inclinarse hacia algo es que uno empieza a ganar impulso, o una especie de energía con la que atraemos más oportunidades, más recursos y las personas indicadas llegan “por casualidad” justo en el momento exacto que más beneficio nos trae.
Un viaje de mil millas comienza con el primer paso.
ANTIGUO PROVERBIO CHINO
Primero que todo, es muy importante tener en cuenta que al inclinarse hacia una oportunidad o proyecto hay que estar dispuesto a comenzar sin ver necesariamente el camino completo desde el inicio.
Es muy común que cuando tenemos un sueño nos da miedo comenzar debido a que no podemos ver cómo lo vamos a lograr o porque el camino parece incierto y por lo tanto no hay promesa de éxito.
¿Has estado en una situación similar? Solo comenzá, luego continuá dando lo que parecen ser los próximos pasos lógicos y el viaje te llevará por último a donde querés ir, o talvez a un lugar mucho mejor. Simplemente se comienza inclinándose en dirección a una meta.
Ahora bien, si estás pensando que aún no estás listo para comenzar o que no es el mejor momento, la verdad es que no existe el momento perfecto para comenzar o en todo caso el momento perfecto es ahora. Elegí un área de tu vida, tu profesión, tus finanzas, relaciones, salud o estado físico en las que quisieras mejorar y ahora inclinate en esa dirección y confiá en que al inclinarte en la dirección correcta, el camino irá apareciendo.
En definitiva, la mejor estrategia es solo lanzarse y empezar. No es necesario saberlo todo para empezar. Lo importante es entrar al juego. Vas a aprender en la práctica.
¡Comenzá ahora!
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