Seguir avanzando a pesar de no ver el camino completo es lo que distingue a quienes logran grandes cosas. Cosas que para los demás parecen imposibles y a eso algunos lo llaman milagro y otros le dicen suerte, pero para quienes lo logran solo es perseverancia.
Una vez que hayamos decidido qué es lo que queremos lograr y empecemos a dar pasos en esa dirección. Lo siguiente para hacer «milagros» en nuestras vidas es perseverar cada día con pequeñas acciones orientadas a nuestra visión.
Aunque la tristeza, desesperación, cansancio y desilusión nos invadan en algún momento, la perseverancia debe ser constante. Como se mencionó anteriormente, esto es lo que diferencia a las personas que logran grandes cosas y los que no obtienen nada significativo en la vida.
Algunos dicen que para lograr cosas grandiosas, todo es cuestión de suerte. Para los que piensan de esta forma, la respuesta es, sí. La suerte sí existe, se consigue con perseverancia.
También es posible el éxito de la noche a la mañana, solamente hay que mantenerse despierto haciendo lo que se requiere y perseverar durante la noche. Incluso cuando la noche sea muy, pero muy larga.
Entonces lograr grandes cosas es similar a lo que aquella frase motivacional dice: “La gota de agua rompe la roca no por su fuerza, sino por su constancia”.
Deja una respuesta